Hace unos meses lanzábamos la convocatoria de las becas de la Cátedra de Ciberseguridad y Ciberinteligencia BeOneSec. Hoy, podemos compartir la gran noticia de que los alumnos ya están trabajando en la investigación, poniendo en práctica sus conocimientos y aportando su talento para dar forma a soluciones reales con impacto en el ámbito de la ciberseguridad.
Detección de anomalías en el tráfico red. Anticiparnos a lo inesperado
Nos encontramos en un entorno dónde la rapidez con la que evolucionan las amenazas hace imprescindible contar con una actitud proactiva en ciberseguridad, clave para anticiparnos a los riegos antes de que se conviertan en un problema real.
Así, la primera línea de trabajo se está desarrollando un sistema de detección de anomalías en el tráfico anómalo generado por nodos bridge de ToR, que emplean técnicas para evitar ser rastreados.
Mediante la observación de patrones de tráfico y la definición de métricas de comportamiento, se busca desarrollar capacidades para identificar desviaciones y señales que evidencien actividad sospechosa.
El objetivo es que este modelo aprenda a distinguir de forma autónoma entre tráfico legítimo y potencialmente peligrosos, aumentado así la capacidad de respuestas y prevención frente a los ciberataques cada vez más sofisticados.
Sonda de ciberseguridad automatizada y escalable
La segunda línea de investigación se centra el diseño e implementación de una plataforma de auditoria activa, capaz de ejecutar tareas bajo demanda a partir de ordenes genéricas. La sonda interpreta estas órdenes y decide dinámicamente qué herramientas lanzar, en qué orden y con qué parámetros, en función de los resultados obtenidos en cada paso anterior.
La solución se despliega sobre contenedores orquestados en Kubernetes, lo que permite un enfoque desacoplado y extensible, adaptado a diferentes contextos y entornos.
Paralelamente se explora la evolución hacia un sistema ASM (Attack Surface Management) automatizado, integrando herramientas de código abierto para OSINT, descubrimiento de activos, análisis de vulnerabilidades y detección de configuraciones inseguras.
El objetivo final es desarrollar una plataforma modular y escalable que facilite la identificación temprana de vectores de ataque y puntos débiles en la infraestructura, reforzando la capacidad de defensa y mitigación de riegos en las organizaciones.
Aprender haciendo
A través de estas dos líneas de investigación la Cátedra de Ciberseguridad y Ciberinteligencia BeOneSec reafirma su compromiso con la formación aplicada y la transferencia de conocimiento, acercando la investigación al entorno real empresarial.
Con estas becas estudiantes no solo están consolidando sus conocimientos técnicos, sino que están contribuyendo de forma activa a la resolución de retos reales actuales en la industria. Para lo que está siendo imprescindible el trabajo mano a mano entre los estudiantes becados y expertos de BeOneSec.
Estamos convencidos que apostar por el talento joven y la investigación aplicada es la mejor forma de alcanzar la cibertranquilidad.
